Hoy me duele mucho la garganta … el músico que me toca me ha llevado a un tornero a que me abriera el granillo para que pase más aire ya que dice que no quiere resistencia dentro de mi. La verdad, es que así pasa mucho más aire, pero ahora el picado va más lento, los agudos le cuestan más, la flexibilidad es más lenta y el primer ataque siempre falla… Pero que libre se siente ahora tocando, ¡aún que no de ni una en su sitio! ¡Que bonita es la libertad !